Créditos imagen: Rachel
María Aparicio Puentes nació en Santiago de Chile en 1981. De pequeña, ya tenía una sensibilidad especial para las artes visuales y le encantaba observarla estructura de los paisajes y de los edificios cuando viajaba en coche con sus padres. Así, su carrera de arquitectura se planteó en ella como algo lógico y natural.
Durante sus estudios, concibe que ser arquitecta, es ver y comprender el espacio relacionándolos con formas, colores, estética, historia y relación con el individuo.
Después de su titulación de arquitecta en Santiago de Chile en 2008, decidió marcharse de su país para irse a España, el país natal de su padre. Se fue a Barcelona para realizar un máster en Diseño Urbano donde aprendió conceptos de arte público, participación ciudadana y regeneración urbana.
Créditos imagen: Claudio A. Troncoso Rojas
Fue en abril 2011 cuando María ‘tejió’ sus primeras fotos. Después de haber seleccionado fotos publicadas en sus favoritos dentro de Flickr, se puso en contacto con los autores para pedirles la autorización para intervenir sobre sus fotos. Así pues, escaneó las fotos en blanco y negro y las perforó con una aguja en ciertos puntos claves. Luego, eligió los hilos y empezó a bordar y con esto, evidenciar las relaciones espaciales subyacentes.
María explica que se trata de trabajar los elementos de manera intuitiva pero siguiendo un proceso bien definido. De cierta manera, utiliza los hilos para dibujar y poner de relieve las conexiones y relaciones invisibles que existen entre los objetos, lugares y personas.
Créditos imagen: Viola Cangi
Créditos imagen: David Richardson
Créditos imagen: Aëlla Labbé
Créditos imagen: Claudio A. Troncoso Rojas
Desde que volvió a Santiago de Chile en el año 2012, María trabaja hoy en el Área de Arquitectura del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes del Gobierno de Chile.
Además, María trabaja con el arquitecto, quien también es su pareja, Claudio A. Troncoso Rojas en dos proyectos : Time of the Thieves (ttt) y Panamericana. Son dos plataformas (una es internacional, otra nacional) en las cuales reúnen fotos e ilustraciones de artistas que les gustan. De esta manera, se ponen en contacto con los autores y los entrevistan, conociendo más allá de sus fotografías, sus gustos, motivaciones y intereses.
Ambos arquitectos están trabajando en el próximo lanzamiento de Pieces of the people We love, el primer proyecto editorial de Thieves Editors, el cual busca explorar un nuevo formato de presentación de distintos autores, sumando a la plataforma web una publicación en papel, generando un proyecto vinculado con el trabajo fotográfico de creadores cuya obra consideramos interesante de ser expuesta, potenciando posibles conexiones entre imágenes y contenidos.
Desde 2011, Maria ha expuesto sus obras en España, EE.UU, Canadá y Chile.
María también recibió una invitación del colectivo español Arte Lateral para exponer en febrero del 2014 en Madrid y un par de invitaciones para colaborar en algunas revistas. Es un primer paso (que le deseamos) en la ruta del éxito !
Créditos imagen: Violet Strays
Créditos imagen: Robbert Geens
ENTREVISTA
Podrías trazar líneas con un bolígrafo en estas fotos, pero en lugar de eso elegiste utilizar el hilo, ¿por qué?, ¿Cual es tu relación con el hilo?, ¿Creciste en un entorno en el cual el hilo, la costura, el bordado estaba presente?, ¿Además, sabes coser o hacer punto de cruz etc.?
Me entusiasma enormemente las infinitas posibilidades que ofrece el hilo. El trabajo del relieve, de ir superponiendo tramas y con esto, ir generando diversas densidades. Otra condición que me gusta mucho es que puedo ir haciendo y deshaciendo según mi parecer. Una línea trazada con un bolígrafo para mi, es de carácter permanente no así una puntada con hilo que fácilmente puede desaparecer. La única huella que quedaría seria el agujero, pero al superponer varios hilos, este agujero se pierde aunque hay veces en que el agujero está ahí siempre dado que no siempre funciona superponer información (hilos) sin una razón.
Mi relación con el hilo no fue buscada de manera intencional. Tampoco crecí en un entorno donde viera máquinas de coser o mi madre bordando especialmente. Estas aproximaciones con el mundo del hilo ocurrieron de la misma manera como me imagino, en la mayoría de todas las casas.
Recuerdo que en la asignatura de “Técnico Manual”, (cuando tenía unos 10 años), nos enseñaron distintos puntos, pero no me agradaba especialmente aprenderlos. De hecho, siempre me encontraba terminando los trabajos la noche anterior y le pedía por favor a mi mamá que me ayudase a terminar el trabajo. Hubo una vez, cuando tenía alrededor de 12 años, donde disfrute enormemente bordar un trabajo, punto por punto, elegiendo cada color, cada forma. Todavía lo tengo y admiro la paciencia que tuve esa vez de bordar ese paisaje y disfrutar tanto el proceso.
Más adelante, ya estando en la Universidad estudiando Arquitectura, retomé el contacto con el hilo al proponer unos ejercicios académicos en torno a la escala mediante el uso de este material. Fue una experiencia bella y marcadora.
Se coser lo más básico. Hilvanar, hacer punto cadeneta, punto cruz. También me he visto inventando puntos.
En las entrevistas que hiciste, la palabra “colaboración” la repites a menudo. ¿Consideras que el hecho de trabajar con fotografías que no son tuyas pero en las cuales interactúas, es una manera de crear un enlace y de acercarte a los autores de la misma manera que tejes enlaces entre los objetos, paisajes y personas en las fotos?, ¿Esta colaboración tiene su propia importancia en tu trabajo o piensas que podrías trabajar con tus fotos si tuvieras más tiempo?, ¿Crees que trabajar con tus propias fotos te traería una dificultad suplementaria en tu trabajo porque no trabajarías en terreno neutro?.
¡Por supuesto! En las colaboraciones se crea el vínculo desde gestar la invitación, intervenir la imagen y mostrarle al otro, el resultado del trabajo. También al recalcar cuando te invitan a exponer tu trabajo en una publicación que no olviden referenciar al autor de la imagen, eso es muy importante para ambas partes.
Comparto contigo cuando mencionas el término “crear un enlace” al detenerme en una imagen, procesar los elementos que la constituyen, las fuerzas en interacción, percatarme de pequeñas cosas que están ahí y que van ayudando a crear ideas en mi mentes posibles de ser trabajadas con hilos.
Es muy distinto trabajar en colaboración con alguien a cuando he trabajado sobre mis propias imágenes. En la primera situación, en la mayoría de las veces, hay que lidiar con las expectativas del otro y las propias. A veces ha acontecido que quien invita a colaborar tiene muy preestablecido lo que debería ser mi colaboración (uso del color, buscar énfasis en ciertos elementos) y eso dificulta el desarrollo del trabajo. Hay casos en que me han pedido mantener los tonos originales de una fotografía a color, pero eso es muy complicado. Imagina: recibir la imagen, imprimirla, trabajarla con hilos, escanearla. Eso hace que esté muy lejos a su condición original.
Me gusta trabajar sola y tener completa autonomía. Por otro lado, me gusta conocer gente de otras partes, comunicarme en otro idioma y mantener una relación cercana después de haberse generado la colaboración. Cuando eso ha ocurrido, ha sido muy reconfortante.
No veo dificultad extra al trabajar sobre mis propias imágenes. Creo que hay varios puntos que van facilitando el proceso (manejo de los propios tiempos, expectativas personales, créditos de la imagen, venderla sin tener que llegar a un acuerdo con el autor de la imagen entre otras situaciones).
Créditos imagen: Maria Aparicio Puentes y Claudio A. Troncoso Rojas
¿Cómo tuviste la idea de coser por encima de las fotos? Tus primeras fotos bordadas datan de 2011, ¿ves una evolución en tu trabajo, en tu persona, tienes nuevas ideas?
Se dio de una manera bastante espontánea. Sin premeditarlo, me encontraba en la casa de Claudio planeando un proyecto. Mientras el estaba desarrollando una idea en el computador, yo estaba acostada revisando una revista. En el velador, habían muchos hilos y agujas que habíamos comprado recientemente para ver la posibilidad de intervenir unos árboles con estos materiales (cosa que finalmente no ocurrió). Elegí una imagen, la de una chica mirando la cámara en tono blanco y negro y sin pensarlo mucho, mientras conversaba con Claudio iba interviniendo la imagen, haciéndole una especie de collar. Me gusto mucho el resultado, la idea del relieve, del collage que ya venía desarrollando tiempo atrás. Más aún la posibilidad de ir haciendo y deshaciendo según lo que uno iba generando con cada puntada. Desde ese momento que he seguido trabajando.
Créditos imagen: desconocido
Claro que veo una evolución, van desarrollándose nuevas ideas, trabajando sobre distintos tipos de imágenes en función a lo que uno va buscando. El intervenir sobre la indumentaria por ejemplo, me ha motivado hacer un curso de joyería textil con técnicas andinas que empiezo el próximo sábado. Creo que el uso del hilo da para mucho, desde la creación de un collar, pasando por la intervención de una fotografía y terminando en la intervención de una fachada escala 1:1, por mencionarte algunos ejemplos.
¿Qué es lo que más te gusta: el proceso creativo o el resultado final?, ¿Consideras tu trabajo como una manera de relajarte o de desahogarte (o ninguno de los dos)?
En la mayoría de los casos, disfruto mucho más el proceso creativo, aunque hay ciertos trabajos en que cuando he terminado, he quedado realmente feliz y satisfecha con el resultado. Eso ocurre cuando cada hilo tiene su razón de ser, evidenciando relaciones espaciales que subyacen a la imagen, creando un aporte en relación a como es percibida y entendida. Cuando bordo, me es muy fácil abstraerme, me relaja. Disfruto mucho el proceso.
Podrías describirnos un día en la vida de María Aparicio Puentes?
Me levanto a eso de las 8 de la mañana, preparo el desayuno, luego la ducha. Más tarde ir a la oficina a trabajar hasta las 18:30 hrs. Luego de eso, asistir a un taller, ir a ver una película, juntarse con amigos. Volver a casa, descansar con Claudio, regalonear con nuestros gatos, avanzar en nuestros proyectos personales e irse a dormir. Me gusta la posibilidad que ofrece los fines de semana de poder avanzar más en nuestras páginas webs, en mis bordados o por ejemplo, responder con calma estas preguntas. Siento que la semana y los meses y este año pasan muy rápido, una cosa tras otra, sin mucho respiro, por lo que intento de aprovechar los tiempos de productividad, ocio y de compartir con la familia y los amigos al máximo.
¿En qué momentos te sientes orgullosa de ti?
Cuando termino algo que comienzo, cuando sorprendo a alguien que quiero con algún gesto, cuando enfrento mis miedos y los trabajo, cuando tomo un nuevo desafío, cuando quiero aprender algo nuevo, cuando veo que una de mis plantas está creciendo…son muchas instancias.
¿Cuáles son tus fuentes de inspiración, los artistas que te gustan?
Ver una película, ir a una exposición, a una charla, los viajes, las conversaciones, detenerme en lo bello (un gesto, el movimiento de un gato, un camino lleno de verde, un florero con flores multicolores, una canción). Todo lo que me rodea puede ser en un momento inspirador. Depende de mi estado de animo y en mi capacidad de ser consciente del estar aquí y ahora, conectada con la realidad, la vida.
Artistas que me gustan son muchos! Anni Albers, Gordon Matta-Clark, Henri de Toulouse-Lautrec, Henri Matisse, Claude Monet, Matilde Pérez, Karen Schifano, Sarah Morris, John Cage, Noam Rappaport, Rachel Whiteread, Sol Lewitt, Dan Flavin, Christo y Jeanne-Claude entre tantos, tantos, tantos otros.
Créditos imagen: Maria Aparicio Puentes y Claudio A. Troncoso Rojas
Tal vez me equivoco, pero tengo la impresión de que la escena artística latinoamericana esta surgiendo desde hace unos años. ¿Tú también tienes esta misma impresión?, ¿Viviendo en Chile, dirías que hay muchas oportunidades para el ámbito artístico en Latinoamérica?
El arte latinoamericano desde nuestra perspectiva chilena ha tenido un desarrollo lento pero constante, abriéndose nuevos espacios y difusión, pero siempre muy vinculados a una elite que tiene los recursos para consumir y acceder a esas manifestaciones culturales. Por otro lado, eso no habla de buena calidad artística porque históricamente en Chile, lamentablemente siempre se ha mirado al referente foráneo, principalmente hacia Estados Unidos y Europa, antes que a sus propias raíces latinoamericanas
Ciertamente a lo largo de la historia de mi país, han habido casos puntuales y excepcionales de artistas, enraizados en la historia y cultura latinoamericana (Violeta Parra, Gabriela Mistral, Víctor Jara entre otros destacados exponentes) pero siento que falta actualmente en los artistas una capacidad de ver al interior de América y de sus contextos específicos para lograr tener una voz y desarrollar una manifestación representativa que evidencias los temas y problemáticas propios de nuestra región.
En el caso de Chile, este año se aprobó el proyecto de ley que creó el Ministerio de Cultura, factor fundamental para el desarrollo, protección y puesta en valor de las distintas expresiones artísticas como expresión culturales (arquitectura, diseño, artes visuales, artes escénicas, artesanía, artes circenses, patrimonio material e inmaterial, nuevos medios, etc.) y que tiene como objetivo aunar en un organismo estatal a las principales instituciones gubernamentales ligadas a la cultura (Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, Consejo de Monumentos Nacionales y la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos). Las oportunidades existen (becas, apoyos económicos, pasantías, etc.) siendo muy importantes para el desarrollo artístico y creativo, como también lo es crear estrategias de asociación con distintos actores y sea públicos como privados, creando nuevos emprendimientos, innovando y con esto, haciendo más sustentable la práctica y desarrollo de las artes a lo largo del tiempo.
Viajaste por varios países para exponer tus obras, ¿Qué guardas de estas experiencias? ¿Hay un país en el cual te gustaría ir a exponer o simplemente a viajar?
¿Qué guardo de esas experiencias? ¡Las mejores! Creo que una de las mejores cosas del mundo es poder viajar, conocer nuevas realidades, sorprenderse, escuchar nuevos idiomas, probar nuevas comidas, descubrir costumbres, modos de vida. Hay tantos países que me gustaría conocer! Ciudades como Tokio, Nueva York, Ciudad de México o Helsinki. ¡Sería maravilloso! Espero poder concretar esos viajes alguna vez en mi vida.
¿Tienes un consejo que te gustaría compartir con la gente que te lee?
Ser constante, llevar las ideas a cabo. Trabajar con pasión.
Muchas gracias María!
Créditos imagen: Richard Pedaline
Mucho más fotos bordadas están en la página web de María.
LE FIL CONDUCTEUR 